Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como FILOSOFÍA

La buena educación

Imagen
              Con nosotros se cruza don Pablo, un hostelero de nuestro pueblo que dejó de serlo acuciado por su ancianidad. Elegante, sobrio, con un saber estar que rezuma a colonia de hombre de los de antes; nos da los buenos días y bajo su mascarilla se vislumbra el color dulce de una sonrisa. Los que conversábamos al calor del sol de primavera, nos hemos mirado, nos hemos preguntado si alguna vez habíamos hablado con él y nos hemos contestado con la negativa. Pero juntos hemos llegado a la conclusión de que nos ha regalado el deshoje de la margarita de la buena educación porque es lo que tenía que hacer, lo que su conciencia le ha dictado.   Ha seguido su camino y se ha metido en un café donde nos figuramos que ha sonreído y ha saludado al pasar antes de sentarse en la mesa de siempre a esperar que le sirvieran el café.  Como debe ser. Don   Pablo lleva una gorra con un ligero ladeo hacia la izquierda, una americana azul y una corbata que le acaricia las arrugas que brotan en su c

Sin Filosofía, sin Humanidades, sin asideros morales

Imagen
  Platón, Arsitóteles, San Agustín, entre otros muchos y por este orden, ya no estarán en el ordenador en el que se encuentran mis libros de textos. A lo mejor es porque ocupan mucho espacio en la memoria y no dejan que otro tipo de nombres importantes se acuesten por la noche entre el sistema binario de su disco duro. No sé, se me ocurre que son mucho más importantes Zapatero, Aznar, Rajoy o Sánchez, verbigracia, valedores del sistema planetario y perfecto que nos protege como ciudadanos de pleno derecho e izquierdo. En el instituto en el que curso mis estudios obligatorios van a relegar a la Filosofía y, por ende, al resto de HUMANIDADES (así, con mayúscula) al cajón de las cosas que nos deben importar una mierda. Porque, con sinceridad, ¿a quién cojones le importa aprender ese tipo de cosas? A nadie. Porque esas materias nos enseñan a conocer el mundo que nos rodea, la ubicación que tenemos en el mismo y el sitio del cual venimos. Ni más ni menos. Pero, claro, si me desubican,